Según algunos pasajeros, los boletos se terminaron antes de empezar a ser vendidos. Supuestos intermediarios en Facebook.
Hay una cola larga, de al menos una cuadra, de pasajeros que esperan en la puerta de la desvaída estación Mitre, frente a la plaza Alberdi.
Hay un cartel pequeño pegado en un vidrio. Anuncia que los pasajes en tren de Tucumán a Buenos Aires, para junio y julio, están agotados. Hay confusión y caras largas, porque los pasajes para julio supuestamente se comenzarían a vender el lunes 1°; sin embargo, hay quienes aseguran que el 29 de mayo ya no había más boletos.
A pesar del cartel de pasajes agotados, en la puerta de la estación hay un guardia, empleado de una empresa de seguridad privada, que dice que “algo queda”. No sabe responder por qué no sacaron el cartel. Y cuando se le pregunta por los encargados de la estación, dice que no están y que tiene órdenes de no dar a conocer sus nombres. Entonces, no hay nadie que brinde información oficial.
Y también hay desconfianza y sospechas, porque los pasajes que se compran en la boletería están agotados, pero en Facebook apareció una página que los ofrece con algún recargo (Pasajes De Tren Retirotucuman). “Me dijo mi hijo que en internet los están revendiendo. Pero acá nadie nos dice nada. Hay que hacer la cola, esperar y ver si tenemos suerte. Encima la estación es una mugre”, reclamó María Vallejo mientras esperaba su turno. El guardia, que tampoco quiso revelar su identidad, explicó que eso era muy poco probable ya que los pasajes se venden con el DNI del pasajero.
Algunos pasajeros salían con el pasaje en la mano, pero no con los que hubiesen querido, sino con los que había. “Conseguí uno para el 4 de julio, pero el regreso es recién en agosto”, dijo una mujer. Otros, como Ramón Gómez, se tuvieron que ir sin el boleto porque no conseguían para el día que necesitaban.
Estatizado
A pesar de que el tren Tucumán - Retiro pasó a la órbita del Estado nacional en septiembre del año pasado, como parte de la “revolución ferroviaria” de la que suele hablar el ministro del Interior, Florencio Randazzo, en la estación tucumana todavía está el cartel de Ferrocentral, la empresa que explotaba el servicio hasta esa fecha. Ahora está en manos de la sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (Sofse), también llamada Trenes Argentinos. “Cuando (el servicio) estaba privatizado, había un número de teléfono y una dirección de internet donde nos informaban todas las inquietudes.
Ahora que es ‘nuestro’, no existe esa posibilidad”, recriminó Beatriz Verduc en una carta de lectores enviada a LA GACETA. Aseguró que durante todo mayo fue a averiguar por los pasajes para julio y siempre le dijeron que estarían a la venta el 1° de este mes. Pero el 29 de mayo, cuando se acercó a pedir información, le dijeron que estaba todo agotado. Lo dejó asentado en el libro de quejas de la estación (folio 503).
Consultado por LA GACETA, Bernardo Racedo Aragón, presidente del Ente de Turismo, dijo que estaba al tanto de la supuesta reventa de pasajes, aunque sólo escuchó las versiones que circularon por los medios. “En Turismo no recibimos ninguna queja formal al respecto”, dijo, e informó que esas inquietudes deben ser canalizadas a través de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte, que dispone de un teléfono para denuncias (0800-333-0300).
“De todos modos, si esto es real, creo que debería haber más control. Porque si una persona compra 100 pasajes, está claro que es para reventa y que conoce muy bien la dinámica interna del ferrocarril”, deslizó.
Fuente: LaGaceta.com
