martes, 8 de marzo de 2016

Vías que van al cielo

En la temporada pasada el Tren a las Nubes cambió su circuito –más variado y menos cansador que el anterior– haciendo regresar a los pasajeros desde San Antonio de los Cobres a Salta por tierra y agregando una visita a las ruinas de la ciudad diaguita de Santa Rosa de Tastil, parte del Camino del Inca.
Una camioneta del Ministerio de Turismo me pasa a buscar por el hotel con Juan Guantay al volante, quien llega con su acullico –bolo de hojas de coca– abultándole una mejilla. Pasamos frente a una casa con un cartel escrito en tiza: “Hay coca y bica”. Juan me cuenta que la coca se mezcla con bicarbonato para extraer mejor sus jugos, produciendo un efecto adormecedor en la boca. Y agrega, muerto de risa, que una vez llevó por los Valles Calchaquíes a un periodista que comenzó a mirarlo con preocupación al descubrir que mascaba coca: “En un momento el chango tomó confianza y me lo preguntó: ‘¿Pero vos podés manejar así?’. 

Yo no le dije ni que sí ni que no. Pero le advertí una cosa: ‘Ahora al llegar a hacer tu nota en la bodega de vino torrontés en Cafayate, cuando te den las copas para degustar, no vas a poder probar nada’. ‘¿Y por qué no voy poder?’. ‘Porque vos también estás trabajando y no podés trabajar machado’”.Antes del alba llegamos a la terminal de la ciudad de Salta para tomar el Tren a las Nubes. 

En la entrada le compro a una señora de rasgos aborígenes –casi diríase que achinados– un cuarto kilo de hojas de coca para el viaje, a 180 pesos. En el hall un trío toca la vidala-baguala Doña Ubenza, aun en plena noche, para alejar la modorra: “Me persigno por si acaso / no vaya que Dios exista / y me lleve pa’l infierno / con todas mis ovejitas”.

El tren, que ya forma parte de los ferrocarriles míticos del mundo, va de las planicies bajas a la Puna.A LA VíA El Tren a las Nubes comienza a traquetear hacia la Puna bajo la luna llena y el cielo estrellado. La ciudad de Salta queda atrás mientras va aclarando y surcamos verdes plantaciones de tabaco a través de un valle de la Cordillera Oriental en los Andes. A la izquierda los destellos del amanecer se reflejan en los caracoleos del río Toro y el cielo se torna color malva. A lo lejos un gaucho a caballo se pierde en la inmensidad acompañado por dos perros.

A medida que ascendemos la altura nos late en las sienes. A los costados aparecen los primeros cardones en forma de candelabro y grupos de casas de adobe con horno de barro y corral de piedra con ovejas al fondo.El paisaje, cada vez más árido, se enciende con los vivos colores de los minerales a flor de tierra en las laderas sin vegetación. Luego de atravesar un túnel de medio kilómetro alcanzamos los 4008 metros altura: estamos en la Puna, esa árida altiplanicie cuya vegetación se limita a dorados pastizales y arbustos de tola. A los costados del tren corren arroyos congelados y gráciles llamas.

Desde que salimos estoy haciendo mi primera experiencia con el acullico, que se remonta al tiempo de los incas. Además me tomo un té de coca: sin embargo, me duele la cabeza, me baja la presión y mi vecino de asiento se preocupa por mi palidez cadavérica: no tengo fuerzas ni para mirar por la ventana. Llaman al médico, me llevan al vagón de enfermería y me ponen una máscara de oxigeno. 

En cinco minutos estoy como nuevo.Ya hemos cruzado 29 puentes, 20 túneles, 12 viaductos, dos rulos y dos zigzags en nueve horas y aparece San Antonio de los Cobres con sus casas de adobe al fondo de un valle protector con cumbres de 6000 metros.Al pueblo lo pasamos de largo para llegar a las tres de la tarde al famoso Viaducto de la Polvorilla, un gran arco de metal y hormigón de 224 metros de longitud y 64 de altura, el punto culminante de esta gran obra ingenieril. Aquí descendemos del tren un rato junto a un imponente mirador sobre un precipicio, donde los pobladores locales venden sus artesanías.

El tren cruza el viaducto sin pasajeros para hacer una maniobra de cambio de locomotora, ya que a partir de aquí hay que volver. Y al rato regresamos a San Antonio de los Cobres para terminar la travesía en tren.Caminamos por las calles de tierra de uno de los rincones más polvorientos, ventosos y resecos de la Argentina, a 3775 msnm. 
El lugar escapa un poco al pintoresquismo norteño de postal. Pero la desolación del desierto no está exenta de una dolorosa belleza, que enciende de colores vivos las laderas por unos instantes con la luz oblicua del atardecer.Anatolio Tolaba camina con viajeros y las llamas, el noble animal que acompaña a la gente del Norte.

Al bajar del tren hay dos opciones: completar la excursión bajando a Salta en camioneta con una visita a las ruinas de Tastil, o pasar la noche en San Antonio de los Cobres (las dos opciones se ofrecen al comprar el paquete). Y desde ese pueblo puneño se puede contratar una excursión de dos días al pueblo de Tolar Grande, cercano a dos de los paisajes más espectaculares de la Puna: el Valle de los Sueños y el Cono de Arita.

Nos instalamos en el hotel de San Antonio de los Cobres y por la tarde hacemos una caminata con llamas guiada por Anatolio Tolaba, llamero de la Puna como sus antepasados remotos. Vamos hasta su casa de adobe con el corral al fondo, donde lo encontramos dándole de comer a sus doce llamas.Salimos a caminar con dos llamas, una para cada uno: las llevamos con la mano con una cinta de cuero. La mía se llama Burro. Anatolio me cuenta que comenzó su emprendimiento turístico hace cinco años, cuando trajo dos llamas del campo porque las vio muy flaquitas. 

Darles de comer le insumía un presupuesto importante y como de niño él aprendió a tratar con turistas vendiéndoles piedritas de colores, un día fue con una llama a la estación de tren y los pasajeros comenzaron a acercarse solos a sacarse fotos y acariciarlas. Entonces se le ocurrió comenzar con las caminatas. “¿Y ya se pagan la comida las llamas?”. “¡Ahora ellas me la pagan a mí!”.

Avanzamos por el árido valle de San Antonio de los Cobres y mientras observamos la desolación de la Puna, Anatolio me cuenta que cada vez más los jóvenes del pueblo se van y pierden el interés por los animales. Este había sido su caso: se fue a trabajar en unas minas de bórax montaña arriba. Hasta que se dio cuenta de que caminando tranquilo con sus llamitas cuatro horas por día, ganaba más que por 12 horas arriba del camión, para colmo lejos de su familia: “Además a mi no me gusta ser dominado de nadie”.“Acá a la gente no le gusta que se joda a los animales: mi abuela me decía: ‘¿Cómo le vas a hacer eso a las llamitas?’. Pero a ellas lo que les gusta es caminar”, se justifica Anatolio con razón.Mi llama es dócil, camina sin hacerse rogar. Porque el llamero las amansa y les saca la cosquilla acariciándolas mucho cuando tienen un año de edad. Caminamos y conversamos media hora sobre nuestros mundos tan disimiles. Y sin embargo nos entendemos, en todo sentido.

Encuentros a la vera del tren que toca el cielo: un niño coya con una mulita embalsamada.

CIUDAD EN RUINAS 
Al día siguiente tomamos una excursión desde San Antonio de los Cobres hasta las ruinas de la ciudad de Santa Rosa de Tastil (la visita que hacen el día de la ascensión la mayoría de los pasajeros del tren), uno de los mayores centros poblacionales del período tardío preincaico del noroeste argentino (1000-1450 d.C).

El vehículo sube por un angosto sendero trepando una ladera hasta la entrada, donde vemos los primeros rectángulos de pircas de piedra de este poblado diaguita que llegó a tener más de 2000 habitantes en 12 hectáreas. Allí se identificó un trazado urbano con unidades de vivienda, calles principales y secundarias, plazas, mercado y centros político y religioso.

La estratificación social se refleja en las viviendas: en lo alto del cerro está el barrio de casas más complejas, mientras que en la parte baja de la montaña se encontraron otras más sencillas de un solo cuarto. Los muertos eran enterrados dentro del pueblo, junto a la pared en el exterior de las casas. En los barrios altos la riqueza del ajuar funerario era un indicador de nivel social. En cambio, en las tumbas de los barrios inferiores las pertenencias que el muerto se llevaba al inframundo eran pocas.

En los faldeos de los cerros vecinos vemos los cuadros de cultivo con pircas que servían para proteger del viento y la lluvia las plantaciones de poroto, calabaza y maíz.El sitio de Santa Rosa de Tastil fue ocupado a mediados del siglo XIV y no se encontraron evidencias del dominio incaico, ya que cuando el reino del Cuzco avanzó sobre la región los pobladores ya habían abandonado la ciudad, se cree que por decisión propia, acaso por un aumento de la población que hacía inviable la supervivencia en este lugar.

Fuente: pagina12

Apretado por el déficit, Macri anticipa la suba del boleto en trenes y colectivos

(LPO Por Antonio Rossi).-La caída de ingresos y la decisión de Larreta de aumentar el Subte termino de definir el aumento. El aumento tarifario para el transporte público de la región metropolitana que el gobierno de Mauricio Macri pensaba demorar hasta mediados de año se adelantaría para las próximas semanas por la incidencia de tres factores clave: la presión de la administración porteña para ajustar los valores del subte con el fin de reducir los aportes a Metrovías, la caída en los ingresos fiscales y la suba de los subsidios que deben girar mensualmente los funcionarios nacionales para mantener congelados los boletos de trenes y colectivos.
Una vez que la Casa Rosada apruebe los incrementos en danza para el servicio de gas, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich prevé avanzar con la aplicación del primer ajuste tarifario del año para el transporte público de pasajeros. Se trata de un retoque de extrema sensibilidad social, porque el aumento golpea en el bolsillo del trabajador cada mañana. 

De hecho, Cristina Kirchner nunca se animó a concretarlo en toda su extensión, pese a que tuvo diversas alternativas en su escritorio.Los nuevos valores llevarían el boleto de colectivo a $5, el de Subte a $6 y el tren se duplicaría pasando de $2 a $4,50. Los nuevos cuadros tarifarios que están analizando los técnicos de Transporte contemplarían elevar los valores actuales de los viajes en colectivo que oscilan entre los $ 3,00 y $ 3,50 a un rango que iría de $ 5 a $ 5,50 para las primeras secciones de recorrido en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

En tanto, en los servicios ferroviarios, los números que se barajan llevarían el boleto promedio de las líneas diésel de $ 2 a $ 4,50 y las tarifas de los ferrocarriles eléctricos que van de $ 2 a $ 4 pasarían a costar entre $ 4 y $ 6.Por el lado de los subterráneos, la administración de Horacio Rodríguez Larreta ya anticipó que tiene en las gateras una actualización tarifaria para subir el valor de cada viaje de $ 4,50 a $ 6. A diferencia de Dietrich que puede autorizar la entrada en vigencia de las nuevas tarifas de un día para otro con una resolución, Larreta debe convocar a una audiencia pública antes de remarcar los precios del subte. Cumplir con ese paso les demandará a las autoridades locales alrededor de un mes, con lo cual la nueva tarifa podría comenzar a regir en la primera quincena de abril. 

La presión de la Ciudad para retocar el precio del subte—que salió a desplegar públicamente en los últimos días el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli—apunta a bajar el subsidio anual que embolsa Metrovías (la operadora del servicio que controla el grupo Roggio) como compensación de sus costos operativos que no puede cubrir con la venta de boletos.En 2014—el año en que se aplicó el último ajuste tarifario—, el subsidio del gobierno porteño a Metrovías rozó los 1.000 millones de pesos anuales. 

En 2015, el aporte económico a la concesionaria privada llegó a 1.500 millones de pesos. Y para este año, la proyección estimada por los funcionarios de lo habría que pagar en concepto de subsidios operativos en caso de mantener la tarifa congelada se ubica por encima de los 2.000 millones de pesos. En el caso de los colectivos y trenes, la intención originaria de Dietrich era poner en marcha entre junio y julio un nuevo esquema basado en la integración tarifaria para que los usuarios pudieran realizar viajes combinados entre los distintos medios de transporte pagando un boleto único. Además, el programa en juego contemplaba un cambio en el pago de los subsidios que en vez de ir como ahora a las empresas iban a otorgarse a cada usuario por medio de una transferencia directa a su tarjeta SUBE.

Dietrich planeaba aumentar las tarifas a mitad de año, pero la caída de la recaudación de febrero por debajo de la inflación, aceleró el ajuste. El plan de Dietrich se vio alterado por las señales poco alentadoras que dejó la recaudación fiscal de febrero. Por la baja de las retenciones y los últimos cambios en la estructura impositiva, los ingresos de la AFIP registraron en febrero una suba interanual de solo el 26,5%, muy por debajo de la inflación estimada para los últimos doce meses. A los menores ingresos se sumó otra cuestión relevante que impacta en el plano fiscal y que lleva al Gobierno a anticipar el ajuste tarifario. 

Se trata del creciente nivel de subsidios que viene aportando la Nación a las empresas de colectivos y operadoras ferroviarias de la región metropolitana.Tras alcanzado un promedio mensual de 4.500 millones de pesos entre noviembre y diciembre, el monto total de los subsidios a los servicios de ómnibus y trenes habría alcanzado ahora un nuevo récord de 5.500 millones de pesos por mes.

Fuente: Lapoliticaonline.com

Video: Incendio en una locomotora de la línea San Martín

Tren San Martín: Por qué se incendió la locomotora: un problema en el turbo del motor

Desde la operadora indicaron que en esa parte se prendió fuego el aceite. Deberán cambiar ese repuesto en toda la línea.



Policía y Bomberos, esta mañana durante el operativo por el incendio de la locomotora. (DyN)

El incendio de la locomotora del tren San Martín se produjo por un problema en el turbo, una pieza del motor. Así lo explicaron a fuentes de Sofse, la operadora estatal de ese ferrocarril, que negaron que haya habido una explosión.

Según detalló al canal TN Pablo Gunning, vocero de Sofse, el fuego comenzó porque hubo un desperfecto en el turbo del motor del tren. "El inconveniente se produjo en el lugar donde se junta el aceite, que debería haber pasado a estado gaseoso. Pero al no producirse eso y no pasar a ser humo normal de la locomotora, ese aceite tomó temperatura e hizo foco ígneo. Aunque el fuego no se expandió y se apagó al consumirse el aceite", explicó.

Fuentes de la operadora consultadas por Clarín, explicaron que cuando el aceite se consumió, el fuego se apagó, aunque se produjo mucho humo. También detallaron que ese humo ingresó en el primer vagón, debido al viento que genera la propia formación en marcha.

En diciembre, por los mismos motivos que esta vez se produjo un incendio similar en otra locomotora del San Martín. Según fuentes de Sofse, en ese momento cambiaron el repuesto en la máquina afectada y revisaron las demás, todas de origen chino, pero se evaluó que estaban en condiciones. Sin embargo, a raíz de la repetición del problema, ahora van a traer 50 turbos para reemplazar la pieza en todas las locomotoras.

El tren siniestrado ya fue movido de las cercanías de la estación Villa devoto para llevarlo a los talleres de la línea San Martín, donde le harán una revisión final.

Fuente: clarin.com

El San Martín ya tuvo al menos 4 incendios con locomotoras chinas

Ocurrieron en el último año. Son máquinas diesel que se sumaron desde 2014 para renovar el servicio.


Dañada. La locomotora que se incendió el 24 de diciembre en Villa del Parque. (Diego Waldmann)

La línea de trenes San Martín une Retiro con Pilar (la terminal es Cabred), pasando por los partidos bonaerenses de Hurlingham, Tres de Febrero, San Miguel, José C. Paz y Pilar. Y el incendio de hoy es al menos el cuarto que sufre la línea desde las nuevas formaciones chinas se incorporaron al servicio en los últimos tiempos.

Esta línea no es eléctrica, sino que sus trenes son impulsados porlocomotoras diesel. Y desde hace años viene envuelta en polémicas por el estado de sus formaciones y quejas de los usuarios por las condiciones en las que se viaja.

En abril de 2014, la entonces presidenta Cristina Fernández inaugurónuevas formaciones y locomotoras de origen chino, y en el último año hubo al menos cuatro incendios mientras operaban en la línea San Martín.

El pasado 25 de febrero se incendió una locomotora a la altura de la estación Caseros; el 24 de diciembre de 2015 ocurrió algo similar en el barrio porteño de Villa del Parque, y el 29 de abril de ese mismo año se registró el mismo siniestro en Pilar.

El caso de diciembre quedó registrado en una crónica de Clarin.com, cuando también por una falla técnica otra formación de la línea San Martín se prendió fuego cuando estaba por ingresar a la estación Villa del Parque.

Los pasajeros fueron evacuados y no hubo heridos. "Una falla técnica en la locomotora de un tren en servicio produjo un derrame de aceite y el posterior principio de incendio sobre la propia locomotora", indicó en ese momento la Operadora Ferroviaria del Estado de Nuevos Ferrocarriles Argentinos en un comunicado.

Se incendió una locomotora del tren San Martín y dejó 32 heridos

Todos los lesionados "se encontraban fuera de peligro", señaló el director del SAME. Atribuyen la falla a un repuesto en un turbo de la formación.
Por Redacción Día a Día


Los lesionados sufrieron pequeños cortes, traumatismos leves e inhalación de humo. (Foto: Diario Clarín).

El incendio de una locomotora de la línea ferroviaria San Martín, en el barrio porteño de Villa Devoto, provocó heridas a 32 personas, quienes sufrieron pequeños cortes, traumatismos leves e inhalación de humo.

El episodio se registró cerca de las 9 de este martes a unos 500 metros de la estación Villa Devoto, y afectó a una formación diesel que se dirigía hacia Retiro.

El director del SAME, Alberto Crescenti, indicó al canal C5N que "todos" los asistidos se encontraban "fuera de peligro" y fueron llevados a los hospitales Tornú, Zubizarreta, Vélez Sarsfield y Pirovano.

Los pasajeros heridos sufrieron "pequeños cortes, traumatismos leves e inhalación de humo", añadió el médico.

Voceros de la concesionaria del servicio, en tanto, atribuyeron la falla a un repuesto en un turbo de la formación.

La línea de trenes San Martín une las terminales ferroviarias Retiro-Cabred, pasando por los partidos bonaerenses de Hurlingham, Tres de Febrero, San Miguel, José C. Paz y Pilar.

Esta línea no es eléctrica, sino que sus trenes son de traccionado a diesel.

En abril de 2014, la entonces presidenta Cristina Fernández inauguró nuevas formaciones y locomotoras de origen chino, que en el último año sufrieron al menos cuatro incendios mientras operaban en la línea San Martín.

El pasado 25 de febrero se incendió una locomotora a la altura de la estación Caseros; el 24 de diciembre de 2015 ocurrió algo similar en el barrio porteño de Villa del Parque, y el 29 de abril de ese mismo año se registró el mismo siniestro en Pilar.

Nuevo escándalo de Dietrich: usó el helicóptero presidencial para ir a su country

LPOAterrizó en una cancha de polo no autorizada como helipuerto. Voceros del funcionario dijeron a LPO que fue una decisión del Presidente.


Dietrich desciende del helicóptero en un country de Pilar

El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, enfrenta un nuevo escándalo. Luego de que LPO revelara que habría presionado a Isela Costantini para que su familia viaje en primera clase en Aerolíneas Argentinas, ahora sale a luz que el funcionario usó el helicóptero presidencial para ir a su country junto a uno de sus hijos.

Este medio accedió a la imagen donde se ve a Dietrich descender de la aeronave, que minutos antes había aterrizado en la cancha de polo del country Chacras de Murray, en Pilar. Allí, el ministro había alquilado una casa en el verano y el helicóptero presidencial lo acercó para comenzar el descanso del fin de semana.

El hecho ocurrió el sábado 13 de febrero pasado, tras un acto que Dietrich compartió en Quilmes con Mauricio Macri, por la inauguración de un tramo del Roca. Voceros del ministro consultados por LPO confirmaron el viaje en la aeronave presidencial, pero lo adjudicaron a una decisión del propio Macri.

Concretamente, los voceros dijeron que después del acto en Quilmes, Macri viajaba a su quinta Los Abrojos, en Los Polvorines, y se ofreció a “acercar” a Dietrich a su country en Pilar. Incluso, dijeron que el propio Presidente estaba dentro del helicóptero en el momento que se tomó la imagen que acompaña la nota.

Fuentes del sector aeronáutico explicaron que el costo de una hora de vuelo en el Sikorsky S-70 A-30 Blackhawk (H-01) de la Presidencia -conocido como “Malvinas Argentinas”- es de alrededor de 4 mil dólares. Consultados los voceros del ministro sobre si no creen que sea un abuso de los bienes del Estado, lo consideraron “opinable”, pese a que el desvío que tuvo que realizar la aeronave en su ruta hacia Los Polvorines fue bastante considerable.

Las explicaciones oficiales también habían dejado dudas en torno al polémico pase a primera de la familia de Dietrich. En ese momento, desde el Ministerio argumentaron que la diferencia fue abonada por Air France. Pero abogados consultados por este medio indicaron que eso podría configurar el delito de dádivas ya que se trata de una empresa del sector que es regulada por la cartera de Dietrich, y que en este caso está otorgando un beneficio a su familia.

Sin habilitación

Un tema complejo que surge de la foto de Dietrich en el helicóptero presidencial es el lugar utilizado para el aterrizaje. Se trata de una cancha de polo de un country, que no tiene habilitación de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac), el único organismo que puede otorgar esas autorizaciones.

En los listados oficiales de la Anac no figura la cancha de polo del country Charcas de Murray como uno de los helipuertos autorizados. A pesar de esto, una fuente de Pilar indicó que es “muy habitual” que helicópteros aterricen en ese lugar.

Dos fuentes del sector aeronáutico coincidieron ante LPO que sería muy extraño que se autorice una cancha como helipuerto. “Legalmente no se puede aterrizar ahí, los terrenales no podemos hacerlo”, explicó un experimentado piloto.

Más allá de lo estrictamente normativo, hay un tema aún más grave que atañe a la seguridad presidencial. Las fuentes analizaron la imagen del helicóptero y alertaron sobre la cercanía del lugar de aterrizaje con torres y cables de alta tensión. “A simple vista es muy temerario”, señaló el piloto, mientras que la otra fuente agregó que nunca se podría haber habilitado un lugar tan cercano a los cables de alta tensión, y hasta lo juzgó “irresponsable”.

Este medio ya había dado cuenta de la inquietud que existe en el entorno del presidente porsu nuevo hobby de pilotear helicópteros durante los fines de semana, algo que hace junto a Joaquín Spokojny, uno de sus secretarios. La preocupación es que Macri no tiene experiencia ni licencia para pilotear, y además utiliza un Robinson 44, una aeronave de seguridad bastante precaria.

Joaquín Spokojny es hermano de Leonardo, titular de la empresa Beech Flying, a la que Macri como jefe de Gobierno porteño le alquiló en 2014 dos helicópteros por 5.262.000,00 de pesos, según reveló Clarín.

Un dato extra es que apenas asumido presidente Macri habría ordenado desplazar a todos los militares que estaban encargados de pilotear las naves presidenciales (algo que está regido por la normativa nacional) y los reemplazó por civiles de su confianza, que fueron los que lo transportaron durante los últimos años en la campaña. Además de los hermanos Spokojny, en esa decisión también tuvieron influencia Carlos y Diego Colunga, que manejan la empresa de vuelos privados Mac Air, propiedad de Franco Macri.

Fuente: Lapoliticaonline.com