Más de 800 chicos y jóvenes tuvieron atención y control médico gratuito gracias a la visita del Tren-Hospital para Chicos de la Fundación ALMA.
Durante diez días, atendieron a pacientes de las localidades de Atahona y Monteagudo y zonas aledañas. En esta oportunidad, se aritucló el traslado con la Fundación Ruah, ente social de la empresa ByV Transportes, concesionaria de la línea urbana 19, que puso a disposición del operativo un micro para trasladar a los niños y niñas de las zonas más alejadas hacia el tren, donde médicos de diferentes especializaciones los aguardaban para control.
En total se atendieron 820 chicos y jóvenes. El tren consta de tres vagones de trocha angosta, que son transportados por los ramales de carga del Ferrocarril Belgrano y se afincan en estaciones con vía accesoria, tal el caso de Monteagudo y Atahona, en la zona de Simoca.
Silvia Barrena, la coordinadora del tren, explicó que el tren proporciona sus servicios en localidades de Tucumán, Salta, Jujuy y Chaco. “Hay cantidades de escuelas diseminadas por la zona que no podían llegar por falta de medios, por eso fue muy importante la articulación con la Fundación Ruah que proporcionó el transporte para que puedan llegar hasta el tren”, destacó.
“No hemos detectado casos graves pero sí agudos de algunas enfermedades respiratorias y hemos hecho informes por triplicado para las comunas y el Caps”, explicó. Además de los consultorios, el tren tiene laboratorio y equipos de rayos. Además, está en condiciones de atender situaciones de emergencia.
El tren conduce médicos voluntarios de todo el país. En este caso, hubo profesionales de Tierra del Fuego, Neuquén, Córdoba, Buenos Aires y Tucumán, entre otras provincias.
Intensificar las acciones
Por su parte, el titular de ByV Transportes y de la Fundación Ruah, Miguel Fernando Villagra, prometió para el año que viene, intensificar las acciones. “Queremos que esto sea una escalera, vamos a estar más comprometidos con nuestros voluntarios”, aseveró tras expresar su satisfacción por la entrega y el compromiso de los choferes de la empresa que donaron su tiempo.
Asimismo, Alberto Moyano, chofer voluntario de la línea 19 se mostró muy emocionado. “No tiene precio llegar a la escuela y ver la carita de los chicos, esto que hacemos es mínimo pero apuntamos a darle una mejor vida al hermano y al ser querido”, expresó. “Espero poder seguir porque estas son las cosas que hacen a uno sentir a alguien”, anheló Moyano.
Fuente: Tucuman a las 7 http://www.tucumanalas7.com.ar/
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